La definición de los juegos de casino no sería otra que la de una actividad de entretenimiento que permite apostar a través de distintas opciones con el fin de acertar unos resultados concretos. Sin duda, un modo de diversión que acompaña al ser humano desde casi el principio de los tiempos.

Si bien es difícil afirmar a ciencia cierta en qué momento de la historia se comenzaron a practicar estos juegos tal como hoy los conocemos, hay datos que apuntan a una época en torno al 2.300-3000 a. C. en la cual aparecen registros de unos juegos practicados con dados y piedras tanto en China como en la Antigua Mesopotamia.

Pasados más de 2000 años, la duda entre algunos gobernantes de la Europa medieval se debatía entre prohibir esta actividad por cuestiones morales (tarea harto complicada por su popularidad) o darle vía libre, pues no en vano las obligaciones fiscales del juego les proporcionaban unos suculentos ingresos. Finalmente, todos iban claudicando e inclinándose por la segunda alternativa, aunque incluyendo una regulación específica que garantizase el orden.

Se dice que estos juegos de apuestas incorporaron en Génova y Amberes un nuevo fin para esta actividad, como era el de una especie de seguro de vida. Es decir, cuando en ocasiones un vendedor ambulante u otra persona con una ocupación similar emprendía un largo viaje, era una práctica común el apostar sobre su propio destino. Si por alguna razón no regresaba con vida, se convertía en ganador y su familia recibía el pago de la apuesta. Un amargo cobro que resarcía en parte su pérdida.

En una era más “moderna”, los juegos de apuestas siguieron manteniendo su protagonismo. Así sucedía en la época del imperio romano, en la que se apostaba por los animales o los gladiadores durante sus juegos del circo. Posteriormente, la llegada de las cartas al continente europeo no hizo otra cosa que reforzar la tendencia al juego y las apuestas, que desde entonces ha continuado hasta nuestros días.

A lo largo de la historia del casino siempre ha destacado un buen número de jugadores entre los personajes más famosos de cada época, lo que demuestra la relevancia que han tenido estos juegos a través del tiempo. Figuras históricas como Napoleón Bonaparte fueron grandes aficionados al juego, cuyas estrategias aplicarían en el campo de batalla.

Aparición de los casinos

No fue hasta 1638 que los casinos comenzaron a aparecer como tal. El primer caso del que se tiene constancia es el Casino di Venezia (aún presente), que recibía por parte de las autoridades el permiso para organizar pacíficas sesiones de juego durante el periodo de carnavales de la ciudad. Aunque no fue hasta finales del siglo XVIII que estos establecimientos comenzaron a recibir de forma oficial la denominación de ‘casino’, en italiano ‘casa pequeña’.

Desde entonces se ha experimentado un boom en la construcción de estos lugares de juego que aún perdura en nuestros días. Alemania fue uno de los países en cuyas ciudades arraigó con más fuerza esta tendencia. Por no hablar de Montecarlo, una ciudad que cimentó su gran popularidad en la presencia de sus llamativas construcciones con este tipo de establecimientos.

A medida que estos locales se han ido completando con otras variedades de juego tan populares como blackjack o la ruleta, su popularidad se ha ido disparando más si cabe. Hoy en día existen ciudades como Las Vegas que han nacido a la sombra de esta actividad. Los casinos significaron el adiós a las antiguas tabernas y los pequeños locales en todas partes del mundo para dar paso a estas extravagantes construcciones que en la actualidad albergan el ocio.

Desde la legalización del juego en Macao, la ciudad asiática le está quitando gran parte del protagonismo a la “capital mundial del entretenimiento” (Las Vegas) y sus casinos ofrecen en la actualidad seis veces más de beneficios que los de la popular ciudad de Nevada. El hecho de que en una China con casi 1.400 millones de habitantes no esté autorizado el juego tiene buena parte de la culpa en ello.

En los últimos años, los casinos se han encontrado con otra circunstancia nueva que aparece como un nuevo reto, la de aprender a convivir con otro de los invitados a esta fiesta, el juego online. Hasta el momento parece que la conexión funciona, pero habrá que ver lo que la historia nos aguarda.